Desde Bristol, Reino Unido, una mezcla pionera de soul relajante y paranoia.
87
Con influencias tan variadas como el reggae de la diáspora caribeña en su Bristol natal y los inicios del rap británico, Massive Attack creó una nueva estética al mezclar una claridad notable con la paranoia de la marihuana. Esta tensión entre la armonía y el malestar subyace en todo su álbum debut, pero alcanza su pico en su canción más conocida, “Unfinished Sympathy”, cuyas cuerdas danzan con sampleos vocales inquietantes, mientras que la cantante Shara Nelson lamenta un amor no correspondido. En estos cinco minutos de soul, Massive Attack nos sacude y nos reconforta al mismo tiempo.
El grupo fue considerado pionero de un nuevo género caracterizado por sus atmósferas relajadas, conocido como “trip-hop”, y que generó decenas de imitaciones. Lo cierto es que en Blue Lines no hay nada tranquilo: sus melodías eufóricas son atravesadas por una voz siniestra y la línea de bajo que rebota entre el beat se rompe hasta casi alcanzar la distorsión. Si nos comunica algo es que siempre hay una razón para estar alerta.
“Nunca he sido un idealista, pero sentí que podía cambiar la vida de otras personas con lo que hacíamos”.